El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, defendió la irrupción de las fuerzas de seguridad de su país en la embajada de México para capturar al exvicepresidente Jorge Glas, quien se encontraba refugiado en la sede diplomática en Quito.
En un comunicado, el mandatario reconoció que ha tenido que tomar decisiones excepcionales “para proteger la seguridad nacional” y añadió que su país «rechaza cualquier tipo de inmunidad a criminales, delincuentes, corruptos y narcotraficantes”.
Glas, quien fue vicepresidente ecuatoriano de 2013 a 2017, fue condenado por corrupción en Ecuador, pero había salido libre luego de que un juez aceptara un recurso de habeas corpus por parte de sus abogados defensores.
Tras nuevas investigaciones en su contra, se refugió desde el 17 de diciembre en la embajada mexicana, país que le concedió asilo político el viernes, horas antes de su sorpresivo arresto.
Luego del asalto, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ordenó la suspensión de las relaciones diplomáticas con Ecuador al considerar que se trataba de una violación flagrante al derecho internacional y a la soberanía de su país.
El sorpresivo operativo policial también ha recibido fuertes críticas desde dentro y fuera de Ecuador, siendo calificado por la Organización de los Estados Americanos (OEA) como “improcedente”.
Noboa calificó a Glas como un «delincuente sentenciado, involucrado en crímenes muy graves».
El presidente insistió que su país no podía correr el riesgo inminente de su fuga, «como nos ha pasado antes, y se burlen nuevamente del pueblo ecuatoriano”.
“Al pueblo hermano de México quiero expresarle que siempre estaré dispuesto a resolver cualquier diferencia, pero que la justicia no se negocia”, insistió Noboa en el comunicado.
Preocupación por la salud de Glas
Tras su detención, Glas fue trasladado a una cárcel de máxima seguridad en Guayaquil, aunque este lunes se informó que fue hospitalizado por una sobredosis de ansiolíticos y antidepresivos.
El Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y Adolescentes Infractores (SNAI) informó que el exvicepresidente habría sufrido una “descompensación por su negativa a consumir alimentos” durante 24 horas, pero que su condición ya era estable.
Glas formó parte del gobierno del expresidente ecuatoriano Rafael Correa, quien en sus redes sociales se ha hecho eco de las denuncias que aseguran que su antiguo compañero de binomio ha sido víctima de de varios abusos y fallas legales, mostrando su preocupación por su vida.
Correa se encuentra desde 2017 en Bélgica donde le fue concedido asilo político.
En 2020 fue condenado en ausencia a ocho años de prisión por cohecho agravado en un caso que el exjefe de Estado ha denunciado como producto de una persecución política.
(Imagen: Isaac Castillo / AFP)
PURANOTICIA // BBC MUNDO