Málaga se rinde a ‘Del otro lado’ y ‘Fantasía’, dos autorretratos familiares sobre el tiempo y el perdón

La verdadera vida de los festivales, especialmente el de Málaga, a veces es todo eso que sucede mientras la sección oficial hace sus planes, sus fotos y sus paseos por la alfombra roja. En el apartado de los documentales, por ejemplo y de momento, se ha asistido ya en apenas tres jornadas a algo muy parecido a un milagro: ‘Del otro lado’, del colombiano Iván Guarnizo, es su título. Y no lejos de él, menos ambicioso quizá pero en el mismo registro tan cerca de la búsqueda como de la herida del tiempo, ‘Fantasía‘, de Aitor Merino. Los dos nacen del impulso de conocer y conocerse, los dos ambicionan su propia perplejidad y los dos acaban por convertirse en autorretrato que también es la perfecta imagen de una mirada que sólo ansía algo parecido a la sanación.

La historia que Guarnizo más que simplemente contar vive en lo más íntimo de su carne impresiona desde la primera línea. El cineasta decidió un buen día buscar al hombre que en 2004 y durante 603 días mantuvo secuestrada a su madre. Beatriz Echevarry, de ella se trata, falleció a consecuencia de un cáncer en 2012, justo cuando el presidente entonces de Colombia Juan Manuel Santos anunció por sorpresa el diálogo de paz con la guerrilla de las FARC. «Poco antes de morir le escuché decir a ella que perdonaba a su raptor», comenta el director por aquello de dar con la piedra fundacional de todo. En 2016 se firmarían los acuerdos de paz. Guarnizó empezó a leer entonces los diarios que dejó su madre y que nunca se atrevió a tocar siquiera, y el proyecto durante tanto tiempo postergado dio por fin sus primeros pasos.